La sucesión de Fibonacci es una sucesión de números enteros donde cada término es la suma de dos términos precedentes. He aquí la sucesión de Fibonacci: 0, 1, 1, 2, 3, 5, 8, 13, 21, etc. Por ejemplo la cifra 13 se obtiene con la suma de 5 más 8. El 21 con la suma de 8 y 13 y así va siguiendo.
¿Te preguntas por qué puede ser tan famosa esta sucesión de números?
De hecho, la sucesión de Fibonacci es tan famosa ya que los científicos se han dado cuenta que era una parte integrante de la naturaleza. En efecto, esta sucesión de números permite crear una espiral logarítmica conocida bajo el nombre de espiral de Fibonacci.
¿Y adivinas qué? Se encuentra un poco por todos lados… Desde los más pequeños elementos de la naturaleza a objetos más gigantes. Por lo tanto, encontraremos la espiral de Fibonacci en las galaxias, el ADN, huevos, plantas, etc.
Visto que el universo responde a leyes matemáticas, la pregunta que nos planteamos es… ¿quién o qué ha podido crear el universo de una manera tan precisa?
Mientras esperas tener la respuesta a esta pregunta, te dejamos descubrir la espiral de Fibonacci en el corazón de la naturaleza…
Antes que nada, he aquí cómo obtener la espiral de Fibonacci según la sucesión matemática. Simplemente colocamos los números de la sucesión de Fibonacci de esta manera antes de dibujar la espiral:
A partir de ahora, echa un vistazo, descubriremos la espiral de Fibonacci en la naturaleza…
Encontraremos esta espiral en el caparazón perfecto del nautilo…
O en la forma del Huracán Irene…
O incluso en la forma de las galaxias en movimiento:
Aquí, una vista microscópica del ovario de un pez (el pejesapo):
O en la división de una célula cancerosa. Esta micrografía confocal compuesta utiliza el microscopio timelapse para mostrar una célula cancerosa que sufre una división celular. El ADN aparece en rojo y la membrana celular en cian. La célula redonda del centro tiene un diámetro de 20 micras:
He aquí otros 16 ejemplos sorprendentes de la sucesión de Fibonacci en la naturaleza.
1 – Huevo de gallina.
La sucesión de Fibonacci al comienzo de la vida.
2 – Col romanesco.
La col romanesco es un ejemplo impresionante de la espiral de Fibonacci. Cada nodo es una propia espiral de Fibonacci.
3 – Aloe Vera.
Muchos cactus muestran la espiral de Fibonacci. Puedes ver cómo cada conjunto de hojas se enrollan en espiral.
4 – Buena Mulata
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La Buena Mulata es un pimiento que también crece en la espiral de Fibonacci.
5 – La flor de girasol.
Aquí también las semillas de girasol siguen, a diferentes niveles, la espiral de Fibonacci. Es un poco más difícil de reconocer pero si miras bien verás que son muchas espirales superpuestos con un mismo punto de origen (centro de la flor).
6 – Las margaritas.
Igual que para la flor de girasol, seguimos encontrando la espiral de Fibonacci.
7 – Las piñas.
Todas las piñas están dispuestas y construidas según la sucesión de Fibonacci. El tamaño de los conos en las piñas aumenta a medida que te mueves hacia afuera una y otra vez siguiendo la sucesión de Fibonacci.
8 – Los camaleones.
La cola de estos animales se enrolla naturalmente según la espiral de Fibonacci.
9 – Ciempiés gigantes de América.
La espiral de Fibonacci es considerada como un modelo de menor resistencia.
10 – Las orugas.
Una oruga monarca a punto de formar una crisálida toma naturalmente la forma de una espiral de Fibonacci.
11 – Los pangolines.
En reposo, los pangolines con escamas protectoras toman forma de una espiral de Fibonacci para así poder descansar protegiendo su vientre (parte blanda que no tiene protección).
12 – Los helechos.
De nuevo la espiral de Fibonacci en las esporas de un helecho llamado Koru.
13 – Caracoles y huellas digitales.
Aquí, se puede encontrar la espiral de Fibonacci en la forma del caparazón de un caracol así como en las huellas digitales.
14 – Los elefantes.
Espiral de Fibonacci natural proviniente de la trompa de un elefante jugando con el agua del río.
15 – Las plantas.
Una vez más, la espiral de Fibonacci en una formación de hojas de helechos.
16 – Las obras de arte.
La espiral de Fibonacci en la obra de Katsushika Hokusai : «La gran ola en altamar de Kanagawa». Parece también que las obras de arte no pueden escapar de la sucesión de Fibonacci.
¿Quién era Fibonacci ?
La sucesión de Fibonacci debe su nombre a Leonardo de Pisa, conocido bajo el nombre de Fibonacci. Aunque Fibonacci habría introducido esta sucesión en el mundo occidental por primera vez en 1202, las matemáticas indias lo habían ya observado desdel siglo sexto después de Cristo.
La secuela de Fibonacci permite explicar cómo están dispuestas las ramas y los anillos de crecimiento de un árbol, la disposición de las hojas sobre un tallo y la manera en la que las cáscaras de una piña están dispuestas.
Y sin embargo, no verás la secuela de Fibonacci por todos lados ya que la naturaleza hace prueba de creatividad y de matices para crear toda esta diversidad.
Si deseas saber más, aquí tienes los mejores libros sobre la sucesión de Fibonacci:
- Comprendre le nombre d’or: sans les mathématiques, ou comment l’univers fonctionne en harmonie, le nombre d’or dans la grande pyramide de Gizeh (solamente en francés) de Jacques Grimault. A título informativo, Jacques Grimault es el informador “oculto” del documental La revelación de las pirámides.
- La proporción áurea: La historia de phi, el número más sorprendente del mundo de Mario Livio
- ¿Es Dios un matemático? de Mario Livio
- Golden Section: Nature’s Greatest Secret (inglés) de Scott Olsen.
- The Fabulous Fibonacci Numbers de Alfred Posamentier and Ingmar Lehmann (inglés solamente).
- Fibonacci: el soñador de números de Joseph D’Agnese and John O’Brien.
Aquí tienes también 3 vídeos que te dirán más sobre la sucesión de Fibonacci:
Para ver el vídeo con los subtítulos en español haz clic en la pequeña rueda, después en “traducir automáticamente”, elige español y haz clic “subtítulos”.
He aquí un vídeo que está más “centrado en las matemáticas”. Alérgicos a las matemáticas, absteneos.
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Ahora para acabar, aquí tienes un hermoso y pequeño vídeo del canal de Youtube “Spirit Science” que describe más detalladamente los esquemas de la vida y las matemáticas de Dios:
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¿Y tú qué piensas? ¿Esta espiral de Fibonacci es puro azar según tú o es la obra de un arquitecto? ¡No dudes en comentar justo aquí debajo! 🙂
