Observa atentamente un trozo de ámbar…¡Verás flotar partículas de polvo, espinas, incluso de viejos insectos de hace varios millones de años!
Está ahí toda la magia de esta resina fosilizada: su matriz suave y dorada ha preservado los testigos orgánicos de la prehistoria, a través de los mares y los años. Si bien en verdad, se juraría casi ver los pequeños organismos que encierra batiendo sus alas.
Esta sustancia única, mucho más que una gema natural destinada a adornar nuestras joyas, contiene la experiencia de la Tierra y del hombre, los poderes del sol y de la madre naturaleza.
Utilizamos su energía purificante para desintoxicar el cuerpo, aliviar las emociones pesadas o hacer espacio a las nuevas riquezas.
Aquí te mostramos el ámbar y sus virtudes casi mágicas.
El ámbar, resina milenaria con energía terapéutica
Desde que el mundo es el mundo y que el humano lo recorre, el ámbar es uno de los tesoros más antiguos y buscados. Devuelto en las costas después de haber atravesado el tiempo y las aguas, a esta resina solidificada se le apoda el “Oro del Mar”.
Heredado de épocas pasadas, el ámbar también ha sido siempre un poderoso talismán para los seres humanos, ya que contiene los poderes antediluvianos de la Madre Tierra. En algunas tradiciones, también se ha comparado con las “gotas de sol” y se ha descrito como las lágrimas de los dioses. Algunos también han visto en él miel solidificada o el sol en forma mineral.
El ámbar pertenece a una clase limitada de gemas orgánicas. No es un cristal ni un mineral propiamente dicho, sino un producto del mundo vegetal. De hecho, se forma a partir de una resina protectora secretada por los árboles de bosques prehistóricos, y luego se fosiliza a lo largo de millones de años.
Este material único en el proceso de formación singular es muy buscado, ya que sumerge su mirada en un pedazo de ámbar, es un poco contemplar el pasado de la Tierra. Algunos ejemplares, entre los más impresionantes, contienen también insectos, pequeñas lagartijas… ¡e incluso plumas de dinosaurios!
Estos organismos que permanecen intactos quedan atrapados para siempre en el tiempo, condenados a volar o arrastrarse para siempre en la caja de ámbar dorado…
Un purificante vibratorio
Además de su uso como ornamento, el ámbar es muy apreciado por sus propiedades terapéuticas, ya que es portador de la energía de la vida. Al fin y al cabo, procede de la fosilización de una sustancia vegetal, fundamental para los árboles que la segregaron hace millones de años.
El ámbar comprende una fuerte conexión con la tierra, pero también al sol, así como con los seres vivos y materias orgánicas que ha aprisionado en su interior. Es en este sentido una substancia única con poderosos poderes de sanación y purificación.
Como limpiador energético, se utiliza en particular para absorber el dolor y la enfermedad que habitan en el cuerpo. También capta el sufrimiento emocional como un imán y absorbe la contaminación energética de los cuerpos sutiles.
Gracias a esta acción purificante, estimula los mecanismos de sanación y regeneración del cuerpo y de la mente, incrementa la vitalidad y apoya la renovación de los tejidos. Es también ideal para limpiar y estimular los chakras, especialmente el chakra sagrado y del plexo solar.
Al mismo tiempo que absorbe las vibraciones pesadas y los problemas físicos, el ámbar difunde alrededor de él una energía dorada y cálida, vértice de un bienestar general.
Por lo tanto es perfecto para acompañar durante una convalecencia o durante una depresión.
El poder purificante del ámbar es también un excelente apoyo para limpiar las energías de un lugar, ya se trate de casa o de un espacio profesional.
El ámbar a través de los años
Desde los primeros descubrimientos del ámbar hace miles de años en las costas marinas, se reconoce la belleza y la singularidad de esta materia amarilla-dorada. Cálido al tacto, ligero, fácil de cortar, el ámbar encontró inmediatamente su lugar en las costumbres y los corazones.
Con sus raras inclusiones y sus supuestos poderes mágicos, fue una de las primeras mercancías exportadas desde las regiones del Báltico. Entonces se cambiaba generalmente por especias, sal y metales. De hecho, las rutas comerciales prehistóricas fueron trazadas en gran medida por el ámbar, especialmente entre el norte del Mar Báltico y el Mediterráneo.
En algunas culturas, el ámbar se asociaba al sol y su forma natural de gota repelía también las lágrimas en las mitologías nórdicas, griegas y lituanas. Considerada como una piedra de duelo, se integraba en las ceremonias funerarias para honrar a los muertos y era también conocida como talismán para los niños.
El ámbar ha encontrado también muchas aplicaciones médicas. Así, se reducía a un polvo y se preparaba como elixir utilizado para curar la sordera, los problemas de visión, la fiebre o los dolores de estómago. La sustancia dorada también se utilizaba para tratar el asma, la gota, las heridas y las infecciones, así como la epilepsia.
La palabra “ámbar” vendría de anbar, palabra árabe que designa al ámbar gris, sustancia de color similar expulsada por las ballenas y encallada en las playas.
¿En qué puede ayudarte el ámbar?
Invita el aura cálida y dorada del ámbar a tu vida en el día a día, te beneficiarás de su vibración purificante y terapéutica a diferentes niveles.
Podrías especialmente recurrir a esta sustancia color miel para:
- Mejorar un estado depresivo,
- Extraer la sabiduría antigua de la Tierra,
- Estimular el sistema inmunológico,
- Desarrollar la paciencia en las relaciones,
- Utilizar tus talentos en el trabajo.
Virtudes y propiedades
Plano mental/emocional
El ámbar sana y apoya el cuerpo emocional absorbiendo las energías emocionales negativas. Reemplaza estas energías por una vibración cálida y tonificante, propicia a los cambios positivos.
De esta manera, con el ámbar, tus sentimientos pesados, especialmente la tristeza, serán acogidos con benevolencia. La resina dorada envolverá estas emociones de su energía solar para eliminarlas a continuación, por ejemplo a lo largo de una crisis de lágrimas. Luego, difundirá su luz en todo tu cuerpo, colmando el cuerpo y la mente de una dulce sensación de bienestar.
Más particularmente, el ámbar es ideal para desactivar los pensamientos suicidas, sanar progresivamente la depresión (en complemento de un sólido acompañamiento profesional) y calmar la ansiedad. Ayuda también a levantar los obstáculos interiores, como los patrones de pensamiento limitantes y a combatir las energías negativas que provienen del entorno.
Recurre al ámbar si atraviesas un periodo sombrío: su halo dorado te recordará que siempre hay luz al principio del túnel. A que tengas tus recursos no solamente para salir de este periodo difícil, sino también para crear una vida feliz.
La resina milenaria no tiene miedo del tiempo: para ella, ¡nunca es demasiado tarde para irradiar alegría y bienestar!
Sobre el plano mental, el ámbar será además un aliado a elegir para reforzar la memoria. Después de todo, es una verdadera cápsula temporal de la Madre Naturaleza, que encierra en su suntuosa envoltura de oro millones de años de historia…
Plano espiritual
El ámbar es un talismán poderoso, que protege el cuerpo, la mente y el alma en su camino en el plano terrestre y favorece la armonía entre estos tres aspectos del ser.
Este es también un excelente apoyo para conectarse a la sabiduría antigua de la Tierra y a su historia, un poco como el jaspe paisaje. Con él, es por ejemplo posible vincularse a lo vivido en un espacio natural, entrar en contacto con los espíritus de la naturaleza o invocar el saber espiritual de una antigua humanidad.
Este vínculo con el pasado convierte también al ámbar en un buen compañero de exploración de vidas pasadas. Su luz tranquilizadora y sabia puede guiarnos para recibir y comprender las lecciones de nuestras existencias pasadas. Se puede también recurrir a él para liberar y desactivar las memorias ancestrales.
Finalmente, el ámbar, materia orgánica fosilizada, contiene poderosas energías de la vida. Es por lo tanto una excelente fuerza de energía luminosa para el cuerpo, así como un buen soporte para la sanación energética.
Plano físico
Con motivo de sus propiedades electroestáticas, el ámbar es una poderosa sustancia terapéutica, capaz de absorber las toxinas, el dolor y la enfermedad que habitan en el cuerpo. Estimula también el sistema inmunológico así como los mecanismos naturales de sanación del cuerpo.
Podemos aplicar el ámbar directamente sobre una herida para favorecer la cicatrización, o en el lugar de un órgano específico para optimizar su funcionamiento.
Excelente para atenuar el estrés, la depresión y la ansiedad, el ámbar contribuye al mismo tiempo una mejor vitalidad general. Especialmente puede estimular una digestión lenta y refuerza los riñones, la vejiga, el bazo, el hígado y la vesícula biliar.
Utilizado para tratar los problemas de la garganta, el ámbar es también beneficioso para las articulaciones, aliviando la artritis y los reumatismos. Finalmente, se utiliza para calmar los dolores dentales, especialmente en los bebés cuando le salen los dientes de leche.
El ámbar en la vida diaria
Amor y relaciones
En el marco de las relaciones, los rayos dorados del ámbar te animarán a cultivar la compasión y la paciencia entorno a tus seres queridos.
Recuérdate: a esta hermosa gema orgánica le han hecho falta varios millones de años y grandes travesías de los mares, antes de alcanzar su última forma. ¡La paciencia está gravada en ella!
Con sus energías cerca, estarás menos inclinado/a a irritarte de pequeñas manías y otros rasgos de carácter del otro que, como de costumbre, te molestan. Acogiendo en ti sus ondas cálidas, te será más fácil tomar tiempo de respirar profundamente antes de dejarte llevar.
El ámbar te mandará ponerte en el lugar de tu amigo, madre o amante, lo que favorecerá un sentimiento de aceptación.
Preservando tu propia energía y protegiéndote de influencias externas, el ámbar te ayudará así a navegar en los estados de ánimo y vibraciones de los demás. Te sentirás así menos afectado/a por lo que tus seres queridos enfadados o deprimidos te devuelven. Por consecuencia, te sentirás mejor a medida que las acompañas con amor en lo que están pasando.
Además, el ámbar ejercerá una buena influencia en tu vida amorosa. Si estás soltero, su aura cálida invitará vibratoriamente la persona ideal para ti. Aportará también estabilidad y flexibilidad a las parejas ya formadas.
Trabajo y abundancia
El oro del ámbar, además de favorecer la vitalidad en todos los campos, ¡inspira la ambición y la capacidad de cultivar las aptitudes naturales!
Así que mantenla cerca de ti a lo largo de una jornada de trabajo. Su presencia te invitará a sacar tus fuerzas personales para resolver los problemas, aceptar los retos y aportar tu propia luz.
Resina fosilizada, te recordará que en tus venas corre una poderosa energía creativa, que solo pide expresarse a través de tus únicos talentos. Con él, ¡ya no tendrás miedo de brillar!
Su energía de abundancia, trae la fuerza abastecedora de los árboles y de la Tierra, te ayudará para crear una riqueza material duradera.
Finalmente, con su efecto positivo en la memoria, te acompañará a lo largo de un día cargado para recordarte tus diferentes tareas. O incluso, para llevar a cabo proyectos complejos y de larga duración.
¿Cómo utilizar el ámbar?
El ámbar y los chakras
Los matices dorados y anaranjados del ámbar estimulan el chakra sagrado, localizado bajo el ombligo y bajo el hueso pélvico.
Este chakra controla el flujo de energía del cuerpo, donde también está el centro de la gravedad. El chakra sagrado es el lugar de energía de la vida en el cuerpo; está a cargo de los intercambios de informaciones entre el cuerpo y la mente. De esta manera, es de él que emanan el instinto y la intuición.
Un desequilibrio de este chakra se traduce por un sentimiento de confusión, una dependencia excesiva en torno a los demás, la represión de sentimientos y una frustración general vinculada a una dificultad de experimentar la alegría y la satisfacción.
Se emplea entonces los cristales dorados y anaranjados para revitalizar este chakra y restaurar las sensaciones de placer, flexibilidad y contento.
Los tonos amarillos del ámbar resuenan también con el chakra del plexo solar, centro de distribución de la energía y de las relaciones. Apoyado por el ámbar, este chakra asegura la correcta salud de sistema inmunológico y digestivo, así como un sentimiento de libertad individual.
Llevado en joyas
¡El ámbar llevado en joyas es un gran clásico! Aporta a cualquier atuendo la distinción y refinamiento de un tesoro antiguo. Sus colores solares reavivan la mirada y difunden una energía cálida alrededor de su propietario/a.
El beneficio de una joya de ámbar, seguramente, no es solo de orden estético. Llevar un collar en ámbar, por ejemplo, permite también una purificación continua de energías del cuerpo. Esto, al mismo tiempo que proporciona una protección energética contra las influencias nocivas del exterior.
En meditación
Utiliza el ámbar en meditación para conectarte a la sabiduría terrestre, heredada de los tiempos más antiguos o para vincularte a tus vidas anteriores. Te transmitirá los mensajes que vienen del pasado que podrían serte beneficiosos.
También se puede utilizar su energía para purificar un espacio de meditación y para aclarar la mente, el cuerpo y el espíritu durante una sesión
¿Qué piedras utilizar con el ámbar?
Asocia el ámbar a otras piedras vinculadas a la sabiduría antigua, como el jaspe paisaje, para extraer el saber antediluviano de la Tierra y de los Hombres.
También puedes optimizar sus propiedades purificantes combinándolo con el cristal de roca. Esta combinación efectuará una limpieza vibratoria eficaz del cuerpo y de la mente en un espacio vital.
El ámbar y los signos astrológicos
El ámbar es tradicionalmente asociado al signo de Tauro. Mientas apoya su poderoso vínculo a la tierra, aporta a este signo la vitalidad para ir por delante incluso en un periodo problemático.
¿Cómo limpiar el ámbar?
El ámbar es resistente y soportará muy bien todos los métodos clásicos de purificación.
Podrás entonces, sin problemas, sumergirlo en el agua destilada o bien exponerlo a los rayos solares por ejemplo.
Si deseas más inspiración, sigue leyendo nuestro artículo dedicado a las diferentes formas de recargar los cristales.
Mis últimas reflexiones sobre el ámbar
Síntesis entre los rayos del sol y la sustancia orgánica de la Tierra, el ámbar es un fantástico aliado de sanación.
En todos los aspectos de la existencia, desde el cuerpo hasta las emociones, pasando por las energías sutiles, su vibración contribuye al bienestar del ser humano desde hace millones de años.
Absorbiendo los problemas físicos y espirituales en su suntuosa escultura dorada, emite un intercambio de luz, experimentada por el tiempo, optimismo y confianza.
La historia, la sabiduría y las fuerzas de la Madre Naturaleza están contenidas en él: nos ayuda a volver a nuestras raíces, a explorar nuestro pasado y a aprovechar nuestros propios recursos internos para desenvolvernos.
¿Este artículo sobre el ámbar y sus propiedades te ha gustado? Entonces, ¡no esperes a fosilizarte! Compártalo con sus seres queridos.
